Pared Abdominal

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Hernia inguinal

La hernia inguinal es un padecimiento frecuente, se piensa que el 24% la población masculina presentará una hernia inguinal en algún momento de su vida, es más frecuente en hombres con una relación de 7 a 1 con respecto a las mujeres.

Se manifiestan como una tumoración o dolor en una o ambas ingles, una característica puede ser que estas tumoraciones desparecen cuando el paciente se recuesta y que surgen o aumentan de tamaño al realizar un esfuerzo como toser o pujar.

¿Cuándo debe de operarse una hernia inguinal?

Nosotros consideramos que deben de operarse una vez que se han diagnosticado, aunque se ha propuesto que se puede tener una actitud expectante y de observación ante una hernia inguinal, las complicaciones que una hernia puede tener son graves, convirtiendo un padecimiento que tiene un tratamiento sencillo en uno que pone en riesgo la vida del paciente.

¿Cómo debe de operarse la hernia inguinal?

Existen 2 alternativas para la cirugía de la hernia inguinal, la primera es la cirugía tradicional o abierta y la segunda es la cirugía laparoscópica: se ha propuesto que para una hernia de un solo lado y que no haya sido tratada, el tratamiento de elección es la cirugía tradicional, y que para hernias de ambos lados (bilaterales) y recidivantes (que vuelven a salir después de haber sido operadas) la cirugía laparoscópica es la mejor opción.

No se ha observado ventaja de alguna técnica sobre otra, siendo también aceptados el criterio del cirujano y los deseos del paciente para determinar el tipo de procedimiento a realizar. Lo que es indiscutible, es que para la reparación de una hernia inguinal independientemente de la técnica a realizar, debemos de colocar una malla para reforzar los tejidos.

Por vía convencional:

¿Cuál es el resultado de la cirugía?

  • Requiere anestesia general en el caso de laparoscopia y anestesia regional si es abierta.
  • Puede existir tirantez y algo de dolor durante la primera semana.
  • Con cierta frecuencia, se producen hematomas inguinales después de la cirugía, la mayoría de ellos limitados y que no requieren otro tratamiento que esperar a que vayan desapareciendo (especialmente en cirugía abierta).
  • La reincorporación a las actividades habituales se produce entre las 2 y 4 semanas, si bien es recomendable evitar los grandes esfuerzos durante 8 semanas.
  • El índice de reproducción de las hernias inguinales operadas varía entre 1% y 5%, siendo más frecuente en pacientes de edad avanzada, y en hernias directas o ya reproducidas anteriormente.
  • Nosotros preferimos la vía laparoscópica ya que si se ha encontrado menor tiempo de recuperación
  • El paciente ingresa el mismo día de la cirugía y es dado de alta generalmente antes de las 24 horas.

“Es un procedimiento seguro y eficaz en nuestras manos”

Si usted padece de esta enfermedad le brindamos la oportunidad de solucionarlo definitivamente, no se limite a la información contenida en esta página; solicite una consulta personalizada. Muy pronto, usted también puede empezar a sentirse saludable sin restricciones y mejor.

Dr. Juan Carlos Montero Y.
Cirujano Digestivo y Bariátrico

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